He ido retrasando el post debido a que no tenía mucho tiempo para escribir un post demasiado elaborado pero ahí va la crónica en mi ratillo libre antes del concierto de Editors.

Pues la verdad es que el fin de semana resultó mucho más intenso de lo que inicialmente había pensado. Entre todos conseguisteis que el lunes llegase a trabajar bastante derrotado, pero oye, sarna con gusto no pica 😀

El viernes al salir del curro me vine corriendo a casa a comer y a pillar la mochila y de cabeza al aeropuerto. Mis padres me fueron a buscar a Ranón y de allí a casa a cenar en familia antes de salir camino de Nava. En Nava esta gente había alquilado una casa rural para pasar el finde y celebrar los cumples de Lucía y Dani. Fue una noche muy grande de reencuentros y muchas risas. Me habría gustado alargarlo hasta la tarde del sábado pero ya me había comprometido para comer con la familia.

Así que nada, de Nava a Posada de Llanera pasando por Oviedo a ducharme y poco más. La comida con padres, hermanos, abuelas, tíos y prima terminó poco después de las 5 de la tarde, momento en el que procedimos a visualizar algunas fotos de Barcelona y salí raudo y veloz camino de Ribadesella.

Allí había quedado con Omar y Paco y señora que estaban de visita por tierras astures. Acabamos liándonos y cenando por allí. Después de la cena me acerqué hasta Cangas de Onís a buscar a Pablo y nos volvimos a Oviedo.

Después de casi casi quedarnos sin gasolina a la altura de Pola de Siero llegamos a Oviedo donde pasé otra gran noche con Pablo, Cris, Tano, Raúl y Alex y Carmen de pasada que los pobres estaban ocupadísimos…

Por último el domingo tocó levantarse tarde y bajar a comer a casa de mi abuela. Por la tarde un cafetillo con Pablo, Cris, Raúl, Alex y Carmen y a casa a descansar para pillar el primer vuelo al día siguiente que me traería de vuelta a la rutina.

Ya estoy deseando que llegue el viernes… Se dejarán caer por la Ciudad Condal nada menos que Pablo, Cris, Guillaume y Tere!