Cuando en agosto vinieron de visita Héctor y Dido trajeron bajo el brazo además de varios embutidos suculentos y queso asturiano una botella de sidra Trabanco.
Estaba esperando a una ocasión especial para abrirla pero como el tiempo iba pasando y nuestra visita a tierras astures está ya bastante próxima, decidimos degustarla el pasado domingo aprovechando el buen día que hacía.
El evento tuvo lugar en la terraza de casa y nos repartimos un culín cada uno entre Olimpio, Filippo, Gonzalo y yo. Una sensación surrealista la de escanciar un culín y tomarlo mirando a la Opera de Sydney.
¡Gracias Dido y Héctor!
va, nada hombre, solo faltaba!
Yo creo que deberíais haberla ido a escanciar delante del opera house con una bandera de asturias tamaño carpa de circo para rozar el máximo de subrealismo jajaja
Me gustaMe gusta
Ostia ostia.. la idea del Kalandrakas no es nada mala. Imaginate que caviar de foto pa ver dentro de 20 años cuando tengais miniandreinas y minivictors…
Vosotros, la opera, una sidra y una bandera astur!
Me gustaMe gusta